En el vertiginoso mundo del eLearning, la habilidad de adaptar los cursos a múltiples dispositivos ya no es solo una opción, sino una necesidad imperativa.

Piénselo: actualmente, más del 70% de los colaboradores alternan entre computadoras, tabletas y smartphones para acceder a sus cursos. Esta tendencia no solo refleja un cambio hacia estilos de vida más móviles y versátiles, sino que también marca una evolución en cómo concebimos y consumimos el aprendizaje.

Los diseñadores de cursos enfrentan un verdadero desafío en este entorno multi-dispositivo. No se trata solo de asegurar que los textos se vean bien en una pantalla pequeña o que los videos carguen rápidamente en una tableta. Es un juego completamente diferente: ¿Cómo garantizar que un estudiante en el metro, revisando su smartphone, tenga la misma experiencia enriquecedora que otro sentado tranquilamente frente a su computadora en casa?

Imaginemos, por ejemplo, que un colaborador está intentando aprender sobre técnicas de ventas en su teléfono durante un viaje en autobús. Si la plataforma no está optimizada para ese dispositivo, con textos claros y elementos interactivos fáciles de manipular con los dedos, es probable que su experiencia sea menos que satisfactoria. Esto subraya la necesidad de pensar detenidamente en el diseño desde la concepción inicial del curso.

Aproximadamente el 40% de los usuarios abandona una página que tarda más de tres segundos en cargar, lo que destaca la importancia de optimizar todos los aspectos de los cursos eLearning para diversos dispositivos.

Este artículo explorará no solo las reglas esenciales para enfrentar estos desafíos técnicos y pedagógicos, sino también cómo podemos mantener a los colaboradores comprometidos y conectados, sin importar el dispositivo que estén utilizando.

Regla #1: Mantenga la navegación sencilla

Al diseñar cursos para múltiples dispositivos, la clave está en simplificar la navegación.

Piense en un usuario aprendiendo en movimiento; podría estar revisando su curso en un teléfono mientras viaja en metro o en una tableta durante una pausa en el trabajo. En estos contextos, la capacidad de navegar por el curso con facilidad, utilizando solo un dedo o dos pulgares, no es solo una comodidad, sino una necesidad.

Una navegación compleja o confusa puede frustrar rápidamente al usuario y llevarlo a abandonar el curso. Además, en dispositivos móviles, donde el espacio es limitado y los gestos táctiles son la principal forma de interacción, una interfaz abarrotada puede hacer difícil acceder a los elementos necesarios. Por eso, una navegación intuitiva y minimalista ayuda a mantener la atención del estudiante y facilita un aprendizaje efectivo sin distracciones.

Nuestro mejor tip: Diseñe teniendo siempre en cuenta el menor tamaño de pantalla. Un truco efectivo es usar un botón grande y claramente etiquetado para el "Menú", lo que elimina las conjeturas sobre cómo navegar. Además, adapte los iconos y botones para que sean lo suficientemente grandes para ser tocados fácilmente sin errores, y asegúrese de que las señales de navegación sean claras y consistentes en todas las interfaces. Esto garantiza que, sin importar el dispositivo que esté utilizando, usted pueda manejar el curso de manera eficiente y sin frustraciones, mejorando significativamente la experiencia de aprendizaje.

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“El tamaño reducido de la pantalla nos obliga a dar prioridad a lo que realmente importa. Simplemente no hay espacio para nada más." Lucas Wroblewski

Regla #2: Céntrese en baja densidad de información

En el diseño de cursos para múltiples dispositivos, es fundamental entender que menos es más.

Los colaboradores de hoy día suelen estar en movimiento y enfrentan constantes distracciones, lo que reduce su período de atención. Además, la limitada capacidad de memoria de los dispositivos móviles y la preocupación por la duración de la batería también juegan un papel importante. Esto implica que el contenido debe ser directo y fácilmente digestible.

Imaginemos a alguien intentando aprender un concepto complicado mientras espera su turno en la cafetería. Si el contenido es denso y extenso, es probable que pierda interés rápidamente o se sienta abrumado. Por ello, es esencial estructurar el material en pequeñas porciones, que idealmente no deberían requerir más de cinco minutos cada una para ser comprendidas.

Consejo práctico: Divida el contenido en módulos independientes y breves. Esto permite que el colaborador acceda al curso de manera no lineal y consulte información específica según la necesite.

Por ejemplo, podría diseñar un módulo que se centre exclusivamente en un solo concepto o técnica, con ejemplos claros y concisos. Elimine cualquier información superflua que no contribuya directamente al objetivo de aprendizaje. Esto no solo hace el contenido más manejable, sino que también mejora la retención de la información y optimiza la experiencia de aprendizaje, manteniendo al estudiante comprometido y enfocado en lo esencial.

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Regla #3: Diseñe para la claridad visual

La claridad visual en el diseño de cursos eLearning para dispositivos múltiples es fundamental para asegurar que los estudiantes no solo accedan, sino que también comprendan y retengan la información de manera eficaz.

La claridad visual se refiere a la organización, presentación y accesibilidad del contenido de manera que sea inmediatamente entendible al primer vistazo. Esto incluye la utilización de un diseño limpio, el uso de colores y fuentes adecuadas, y la disposición lógica de los elementos en pantalla.

Imaginemos a una persona que consulta el curso mientras está al aire libre o en un rincón de su hogar por la noche. En ambos casos, el contenido debe ser legible y comprensible sin esfuerzo adicional. Esto significa que el tamaño de la fuente, el contraste de color entre texto y fondo, y la simplificación del layout son cruciales para facilitar el proceso de aprendizaje en cualquier situación.

Consejo práctico: Aplique títulos grandes y en negrita para segmentar claramente el contenido en bloques digestibles. Convierta los párrafos extensos en listas con puntos o numeradas, lo cual facilita la rápida identificación y comprensión de los conceptos claves. Utilice iconos y una paleta de colores consistentes para guiar visualmente al estudiante a través del curso. Por ejemplo, use un color específico para destacar las acciones clave y otro para los resúmenes de sección, creando una ruta visual clara que la persona pueda seguir intuitivamente.

Implementando estos principios, no solo mejora la legibilidad y la accesibilidad en dispositivos con pantallas pequeñas, sino que también asegura que los colaboradores puedan concentrarse y absorber la información en ambientes con distintas condiciones de iluminación y distracciones, promoviendo un aprendizaje efectivo y placentero en cualquier entorno.

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Regla #4: Haga que el contenido del curso sea fácil de encontrar

Una característica esencial para que un curso eLearning sea exitoso en dispositivos múltiples es que el contenido sea fácil de encontrar. Esto significa que los colaboradores deben poder localizar rápidamente cualquier sección o módulo específico sin tener que navegar a través de menús complicados o interfaces abarrotadas.

Piense en una persona que necesita revisar rápidamente un tema específico antes de una reunión o mientras prepara un proyecto; la capacidad de acceder a la información de forma rápida y directa puede marcar la diferencia en su experiencia de aprendizaje. Por lo tanto, la claridad en la organización del contenido y la navegación intuitiva son cruciales.

Consejo práctico: Utilice títulos descriptivos y directos para cada módulo y sección. Evite términos ambiguos o creativos que puedan confundir al estudiante sobre el contenido que encontrará bajo ese título. Además, implemente un índice interactivo y un menú fácil de navegar que esté siempre accesible, sin importar en qué parte del curso se encuentre el usuario. Por ejemplo, podría diseñar un menú lateral desplegable que, con un simple toque, muestre todos los títulos de las secciones y subsecciones, permitiendo al estudiante saltar directamente al contenido deseado.

Al mejorar la forma en que el contenido es etiquetado y organizado, y al ofrecer herramientas de navegación claras, usted no solo hace que el aprendizaje sea más efectivo, sino también más agradable y menos frustrante para los colaboradores facilitando así una experiencia más fluida y satisfactoria.

Regla #5: Reduzca el "scrolling" al mínimo

Uno de los aspectos clave para mejorar la usabilidad de los cursos eLearning en dispositivos múltiples es minimizar el "scrolling" o desplazamiento vertical.

Cuando una persona tiene que desplazarse constantemente para acceder al contenido, esto puede convertirse en una barrera que disminuye la eficacia del aprendizaje y aumenta la fatiga visual y mental. Idealmente, el contenido en una pantalla de dispositivo móvil no debería extenderse más allá de tres pantallas de desplazamiento.

Consejo práctico: Divida el contenido en pantallas o páginas que ocupen solo la mitad de la pantalla, complementadas con un botón claro de "siguiente". Esto permite a los colaboradores avanzar a través del material sin necesidad de desplazarse demasiado. Además, mantenga todo contenido secundario como controles de navegación opcionales y enlaces menos relevantes al final de la página. De esta manera, la parte inicial de la pantalla queda libre para lo más importante, asegurando que el contenido principal capture la atención sin distracciones.

Aproveche esta oportunidad para analizar el diseño actual de sus cursos.

• ¿Facilita realmente una experiencia de aprendizaje fluida y accesible para todos los usuarios, sin importar el dispositivo que utilicen?

• ¿Hay elementos de su diseño que podrían simplificarse o ajustarse para minimizar el desplazamiento y mejorar la claridad visual? 

Estas reflexiones le permitirán no solo mantenerse a la vanguardia en el campo del eLearning, sino también garantizar que sus cursos sean verdaderamente inclusivos y efectivos.