Con mucha frecuencia, los cursos eLearning en las empresas no alcanzan su máximo potencial porque se presentan datos y teorías de forma aislada, sin conectarlos con la realidad práctica que los colaboradores enfrentan todos los días.
Esta desconexión hace que, aunque los colaboradores puedan entender la información teórica, les resulte difícil aplicarla de manera efectiva en su trabajo diario.
Piense en esto: así como no es necesario tocar el fuego para saber que quema, tampoco basta con decir que es importante apagar un cigarrillo. Lo que realmente impacta es escuchar una historia sobre cómo un cigarrillo olvidado provocó un incendio devastador en una casa.
Las historias y ejemplos prácticos son, sin duda, herramientas poderosas de aprendizaje.
Narrar cómo se aplicó un conocimiento de manera exitosa o cómo fracasó en ciertas circunstancias permite a los colaboradores visualizar cómo pueden implementar esos aprendizajes en sus propios roles.
También mostrar a través de demostraciones prácticas y visuales cómo alguien ejecuta un procedimiento en situaciones reales ofrece una comprensión más profunda y aplicable que una mera descripción teórica.
Por lo tanto, es crucial que los capacitadores y diseñadores de cursos en línea recuerden que los ejemplos concretos son más efectivos que extensos bloques de texto.
Utilizar ejemplos prácticos es como proporcionar una brújula a los colaboradores, guiándolos para que encuentren su camino en la aplicación práctica del conocimiento adquirido.
Para comenzar a incorporar más ejemplos en sus cursos, considere las siguientes ideas:
Puede sonar simple y hasta cliché, pero algo tan básico como una captura de pantalla puede comunicar mucho más que el texto solo. Esto se debe a que las capturas de pantalla ofrecen una forma visual y directa de enseñanza a través de ejemplos concretos, que es fundamentalmente más efectiva para el aprendizaje.
Cuando sus colaboradores ven una captura de pantalla, no solo están leyendo sobre lo que deben hacer; están viendo exactamente cómo se debe hacer.
Esta representación visual elimina ambigüedades y facilita la comprensión inmediata, lo cual es crucial especialmente en tareas que involucran interfaces complejas o pasos específicos que podrían ser difíciles de describir solo con palabras.
Además, aprender a través de ejemplos visuales como las capturas de pantalla permite a las personas recordar la información más fácilmente.
Ver una imagen de dónde hacer clic o qué configuración ajustar imita la experiencia real de uso, preparando mejor a los colaboradores para replicar estas acciones por su cuenta.
Esta técnica no solo transmite conocimientos, sino que también empodera a las personas al proporcionarles herramientas visuales claras y aplicables directamente en sus contextos laborales o personales.
Aquí algunos ejemplos específicos de cómo implementarlas:
Instrucciones paso a paso: Utilice capturas de pantalla para mostrar cada paso necesario en un proceso, como la instalación de software o la configuración de una cuenta.
Resolución de problemas: Presente problemas comunes y sus soluciones mediante capturas de pantalla. Por ejemplo, mostrar cómo se ve un error específico y luego guiar a través de las capturas de pantalla para resolverlo.
Comparativas: Use capturas para comparar versiones antiguas y nuevas de un programa, destacando las diferencias visuales y funcionales. Esto es especialmente útil para cursos de actualización tecnológica.
Ejemplos de buenas y malas prácticas: Ofrezca capturas que ilustren prácticas recomendadas y errores comunes en el uso de una herramienta o software. Esto puede incluir configuraciones ideales versus configuraciones que pueden causar problemas.
Al crear historias que reflejen desafíos reales, permite que los colaboradores vean la aplicación práctica de la información en un contexto que pueden entender y con el que pueden empatizar.
Por ejemplo, considere un curso sobre acoso sexual. En lugar de simplemente enumerar lo que se debe y no se debe hacer, puede crear una narrativa alrededor de una nueva empleada que recibe mensajes inapropiados de su jefe por WhatsApp.
Este escenario no solo ilustra el problema de manera vívida, sino que también invita a las personas a pensar en los pasos que la empleada podría tomar para abordar la situación.
Detallar el proceso de pensamiento de la empleada, las acciones tomadas y las consecuencias de esas acciones da vida a la lección.
Consejo práctico: Al crear escenarios de eLearning, siempre incluya puntos de decisión donde los colaboradores puedan elegir diferentes acciones y ver resultados variados. Este elemento interactivo no solo mejora el compromiso, sino que también ayuda a entender las repercusiones de sus elecciones, reforzando los objetivos de aprendizaje de manera dinámica.
Aquí hay algunas otras ideas creativas para usarlos en cursos en línea:
Análisis de escenarios complejos: Presente un escenario complicado y pida a las personas que lo analicen y discutan en foros o chats en grupo. Esto fomenta la discusión crítica y el intercambio de ideas entre los participantes.
Itinerarios de aprendizaje basados en historias: Diseñe un curso completo como una gran historia donde cada módulo representa un capítulo del viaje del personaje principal, vinculando los objetivos de aprendizaje con los desafíos que enfrenta el personaje.
Mapas de aventura: Cree un "mapa de aventura" donde cada parada incluye un ejemplo práctico relacionado con un concepto clave del curso. Los colaboradores pueden "viajar" de un punto a otro, desbloqueando mini-lecciones y ejemplos que profundizan su comprensión del tema.
Historias serializadas: Desarrolle una historia que se despliegue a lo largo de varios días o semanas. Cada segmento de la historia puede introducir un concepto clave y concluir con una pregunta o tarea que motive al aprendiz a reflexionar o investigar más.
Cápsulas del tiempo: Permita que las personas creen "cápsulas del tiempo" con ejemplos de cómo aplicarían sus conocimientos en diferentes escenarios futuros. Estas cápsulas se pueden revisar al final del curso para reflexionar sobre su aprendizaje y su capacidad para aplicar los conocimientos adquiridos.
También leer: Un plan de 5 pasos para crear un curso eLearning basado en escenarios
Los casos de estudio son ejemplos detallados que nos ayudan a entender cómo aplicar teorías a situaciones reales.
En el eLearning, son especialmente útiles para hacer temas complicados más fáciles de entender y recordar. Al observar cómo se resuelven problemas en escenarios reales, los colaboradores pueden conectar mejor la teoría con la práctica.
Sin embargo, es crucial evitar que los estudios de caso se conviertan en narrativas largas y tediosas. La clave está en mantenerlos enfocados y relevantes, siempre pensando en lo que es más beneficioso para el colaborador.
Por ejemplo, en un curso sobre cumplimiento ambiental, podríamos usar un caso de una empresa que enfrentó serias pérdidas financieras y de reputación por no seguir las normativas. Este caso concreto muestra claramente las consecuencias negativas de no actuar de manera responsable y permite a los colaboradores ver el impacto directo de sus acciones en el mundo real.
Tome en cuenta que los casos de estudio presentan situaciones complejas donde no siempre hay una respuesta correcta o completa, preparando a los colaboradores para los desafíos que podrían encontrar en su entorno laboral.
Aquí tiene algunas ideas creativas para implementarlos en sus cursos eLearning:
Mini-Casos Interactivos: Divida los casos de estudio en segmentos cortos que se puedan completar en unos minutos. Cada mini-caso podría presentar una parte del problema y permitir a los colaboradores tomar decisiones, ver las consecuencias de sus elecciones y luego pasar al siguiente segmento.
Cápsulas de Video: Cree videos breves que narren diferentes escenarios de los casos de estudio. Estos vídeos pueden mostrar situaciones reales dentro de una empresa, decisiones críticas tomadas por los personajes, y las consecuencias de esas decisiones. Al final de cada video, incluye preguntas de reflexión o pequeñas tareas.
Infografías: Transforme algunos casos de estudio en infografías. Cada infografía puede resaltar puntos clave del caso, estadísticas interesantes, y decisiones importantes.
Series de Casos de Estudio: Presente un caso de estudio largo como una serie de episodios cortos. Cada episodio puede abordar un aspecto específico del caso, y los aprendices pueden seguir la historia a lo largo de varios días o semanas, cada día recibiendo un nuevo "capítulo" para resolver.
Desafíos Rápidos: Después de presentar un breve caso de estudio, proponga un desafío rápido relacionado con el caso. Puede ser una pregunta de múltiple elección, un pequeño ejercicio de resolución de problemas, o una tarea de discusión que los aprendices puedan completar en pocos minutos.
Las metáforas visuales son herramientas de comunicación poderosas que utilizan imágenes conocidas para representar ideas más complejas o abstractas.
En el contexto del eLearning, estas metáforas ayudan a las personas a conectar nuevos conceptos con experiencias o conocimientos previos de una manera intuitiva y visual.
En el entorno corporativo, las metáforas visuales son especialmente valiosas porque facilitan la digestión rápida de información compleja y fomentan una retención más duradera.
Esto es crucial en un ambiente de aprendizaje donde el tiempo es limitado y la eficacia en la comunicación es clave.
Además, estas metáforas pueden hacer que el contenido de capacitación sea más atractivo y menos monótono, lo que aumenta la participación y el interés de los colaboradores.
Aquí tiene algunas ideas de metáforas visuales que puede utilizar en cursos de eLearning para hacer que los conceptos sean más comprensibles y atractivos, sin recurrir a clichés:
Navegación en un mapa: Para enseñar la planificación de proyectos, use la imagen de un mapa con rutas, desvíos y puntos de control. Cada ruta puede representar una fase del proyecto, los desvíos pueden simbolizar riesgos o cambios inesperados, y los puntos de control pueden ser hitos importantes.
Montaña rusa: En cursos sobre manejo del cambio, emplea la imagen de una montaña rusa. Los altibajos representan los desafíos y éxitos que se encuentran en el camino del cambio, destacando la necesidad de resiliencia y adaptabilidad.
Árbol de conocimiento: Utilice la imagen de un árbol robusto para explicar la estructura de un tema o curso. Las raíces representan los fundamentos o principios básicos, el tronco simboliza el desarrollo de ideas y habilidades intermedias, y las ramas y hojas ilustran los conceptos y habilidades avanzadas.
Rompecabezas: Muestre un rompecabezas parcialmente completado para ilustrar cómo diferentes piezas de información o habilidades se unen para formar un conjunto coherente y completo. Esto puede ser útil para cursos que tratan sobre la integración de diferentes áreas de conocimiento.
Brújula: Una brújula puede ser una excelente metáfora visual para cursos sobre ética profesional, mostrando cómo los valores y principios éticos guían las decisiones y comportamientos dentro de una organización.
Hoy en día, mucha gente prefiere aprender visualmente, especialmente cuando se trata de temas complejos. Los videos son un recurso excelente para enseñar porque combinan sonidos e imágenes, lo que facilita la comprensión y el recuerdo de la información.
De hecho, estudios muestran que las personas recuerdan el 95% de un mensaje cuando lo ven en video, comparado con solo el 10% cuando leen el mismo mensaje en texto.
Por ejemplo, en lugar de solo leer sobre cómo operar una nueva maquinaria en una fábrica, un video puede mostrar cada paso en acción. Esto incluiría desde cómo encender la máquina hasta cómo realizar el mantenimiento básico, mostrando claramente cada detalle y asegurando que los trabajadores vean exactamente lo que deben hacer.
Los videos también son ideales para demostrar procedimientos de seguridad, donde es crucial entender cada paso para evitar accidentes. Por ejemplo, un video que muestra las medidas de seguridad para trabajar con materiales peligrosos puede ser mucho más efectivo que un manual escrito porque los trabajadores pueden ver exactamente cómo manejar los materiales de forma segura.
Aquí algunos consejos para crear videos efectivos:
Brevedad y enfoque: Haga que los videos sean cortos y directos, centrados en un solo tema por video. Esto ayuda a mantener la atención y facilita la comprensión.
Contexto real: Use ejemplos y situaciones que las personas puedan encontrar en su trabajo diario. Esto les ayuda a ver cómo aplicar lo que aprenden.
Interactividad: Integre cuestionarios o preguntas dentro del video para que los colaboradores participen activamente. Esto no solo los mantiene comprometidos, sino que también refuerza el aprendizaje.
Alta calidad: Asegúrese de que el video tenga buen sonido y buena imagen. Un video de mala calidad puede hacer que sea difícil entender el contenido y distraer a los aprendices.
Diversos estilos de aprendizaje: Incluya subtítulos y ofrezca explicaciones detalladas para aquellos que prefieren leer o necesitan más información para entender completamente el tema.
También leer:
Involucrar a su audiencia en la creación de ejemplos es un método muy eficaz para profundizar la comprensión y mejorar la retención en entornos de eLearning.
Este enfoque se centra en el aprendizaje activo, donde usted no solo recibe información de manera pasiva, sino que participa activamente en la construcción de su propio conocimiento.
Cuando presente nuevos conceptos en su curso, pedirle que genere ejemplos del mundo real puede ser muy transformador. Esta tarea le obliga a aplicar directamente lo aprendido, lo que fomenta un pensamiento crítico sobre cómo estos conceptos se manifiestan en situaciones cotidianas.
Aquí le presentamos algunas formas creativas para implementar este enfoque:
Foros de discusión: Anime a las personas a compartir sus ejemplos en foros en línea. Esto no solo les permite reflexionar sobre los conceptos, sino que también les expone a diferentes perspectivas y aplicaciones de sus compañeros.
Diarios de aprendizaje: Incentive a los colaboradores a mantener un diario donde registren ejemplos personales relacionados con los temas estudiados. Revisar estos diarios regularmente puede reforzar el aprendizaje.
Mapas conceptuales interactivos: Utilice herramientas digitales para que los estudiantes creen mapas conceptuales que vinculen los conceptos teóricos con ejemplos prácticos de su propia experiencia.
La importancia y eficacia de usar ejemplos en el eLearning son incuestionables. Siempre que se encuentre recurriendo a largas explicaciones textuales, considérelo una señal para introducir un ejemplo.
Los ejemplos dan vida al contenido, haciendo que los conceptos abstractos sean tangibles y relevantes para los aprendices.
Si tiene dificultades para encontrar un ejemplo adecuado, haga una pausa y reconsidere la relevancia de la información.
Recuerde, si no se conecta con aplicaciones de la vida real, puede parecer desconectado e irrelevante para sus colaboradores. Esfuércese siempre por contextualizar el material de aprendizaje a través de escenarios vívidos y aplicables.
Aquí algunas preguntas de reflexión que puede incluir para fomentar una mayor comprensión y conexión con el material:
Incorporar estas preguntas no solo anima a los aprendices a pensar críticamente, sino que también les ayuda a ver el valor práctico del conocimiento adquirido en sus propias vidas.