En el mundo de la capacitación corporativa, 'eLearning' y 'microlearning' suelen aparecer en las conversaciones como si fueran lo mismo.
Sin embargo, como líderes de formación, es crucial entender que no son solo palabras de moda, y definitivamente no son lo mismo.
Cada uno tiene su propio valor y está diseñado para satisfacer diferentes necesidades en el proceso de aprendizaje.
Ahora, hablemos del elefante en la sala—o mejor dicho, del smartphone en la mano de cada empleado.
Es un hecho: el smartphone ha revolucionado por completo la manera en que trabajamos y aprendemos.
Atrás quedaron los días en los que los empleados podían/querían dedicar horas a largas sesiones de formación sin interrupciones.
Hoy, la realidad es que la fuerza laboral quiere aprender de manera rápida, desde su celular, en cualquier momento y lugar, y en esos escasos diez minutos que no están respondiendo correos o corriendo entre reuniones.
Aquí es donde el microlearning brilla, proporcionando pequeñas dosis de conocimiento que encajan perfectamente en nuestras vidas digitales ajetreadas.
Pero no podemos olvidarnos del eLearning más profundo y estructurado. Sigue siendo clave, especialmente cuando se trata de temas complejos que necesitan un mayor nivel de detalle y análisis.
La clave está en saber cuándo utilizar cada uno de ellos.
El microlearning es perfecto para una actualización rápida de habilidades o para responder una pregunta urgente en el trabajo, mientras que el eLearning es su aliado para una comprensión más profunda y completa.
En cualquier caso, como líderes de formación, es crucial reconocer que los empleados buscan cada vez más opciones de aprendizaje que sean móviles, rápidas y fáciles de digerir.
Se trata de ser flexibles y ofrecer lo que realmente importa: capacitación efectiva, sin que los colaboradores tengan que revisar sus teléfonos a escondidas bajo la mesa.
Ahora, profundicemos en cómo hacer que tanto el eLearning como el microlearning trabajen a su favor en este mundo de ritmo acelerado.
En pocas palabras, el eLearning es aprendizaje que ocurre en línea o a través de plataformas digitales. Utiliza la tecnología para entregar contenido formativo, hacerlo interactivo y apoyar el proceso de aprendizaje.
En el contexto empresarial, los cursos tradicionales de eLearning (esos que duran más de 15 minutos) están diseñados para profundizar en un tema de manera estructurada.
Usualmente, incluyen multimedia como videos, animaciones, audios y cuestionarios para poner a prueba el conocimiento, además de recursos adicionales para aquellos que quieran explorar el tema a fondo.
Profundidad del contenido: Estos cursos van más allá de lo básico. Cubren el tema desde lo más elemental hasta lo más complejo, permitiendo a los empleados entender tanto la teoría como su aplicación práctica en el trabajo.
Rutas de aprendizaje estructuradas: El contenido está organizado de forma lógica, comenzando con lo básico y avanzando a medida que el usuario progresa. Es como un tour guiado donde no se deja ningún detalle importante por fuera.
Variedad de recursos: Además del contenido principal, los cursos de eLearning suelen ofrecer materiales adicionales, como PDFs descargables, lecturas complementarias y enlaces para profundizar más. Esto le permite a cada empleado ir a su ritmo y profundizar tanto como desee.
Certificación: Muchos de estos cursos ofrecen un certificado al final. No es solo una palmadita en la espalda, sino un reconocimiento formal que puede añadir al currículum o a su perfil de LinkedIn. ¡Un gran plus!
Estos cursos más largos son perfectos cuando necesita que sus empleados dominen información compleja o detallada.
Aquí algunos ejemplos:
Temas complejos: Cuando necesita que sus colaboradores entiendan en profundidad habilidades técnicas, normativas o políticas de la empresa.
Certificaciones: Para aquellas capacitaciones que requieren evaluación exhaustiva y certificación al final.
Onboarding: Si quiere que los nuevos empleados comprendan a fondo la cultura de la empresa, sus procesos y las habilidades específicas que necesitarán.
Desarrollo de habilidades: Para mejorar habilidades de liderazgo, gestión o áreas técnicas específicas.
Cumplimiento normativo: Cuando es obligatorio que los empleados dominen leyes o regulaciones.
Preparación para roles avanzados: Si sus empleados se están preparando para ascensos o roles más complejos, el eLearning es una excelente herramienta.
Cursos académicos: Donde el eLearning se utiliza con un enfoque más académico, brindando un currículum estructurado que se asemeja al de una clase tradicional.
Duración óptima: Mantenga los módulos entre 15 y 20 minutos como máximo. Este tiempo es ideal para profundizar en el contenido sin cansar a sus empleados. Recuerde, menos es más cuando se trata de retención de información.
Elementos interactivos: No se limite solo a la teoría presentada de forma textual. Incorpore cuestionarios, evaluaciones y actividades prácticas para mantener el interés activo de los empleados y ayudar a fijar los conceptos de manera más dinámica.
Avatares de IA o tutores virtuales: ¡Sí, como en los videojuegos! Los avatares pueden guiar a los empleados, dar retroalimentación y hacer el proceso más dinámico y personal.
Variedad en la presentación: No se quede solo en el texto. Mezcle videos, imágenes, animaciones y gráficos para que el contenido sea visualmente atractivo y no se vuelva monótono. La diversidad en los formatos ayuda a captar la atención de distintos tipos de aprendices.
Agregue cuestionarios cortos al final: Siempre incluya una evaluación rápida al final de cada módulo. Puede ser un quiz de 3-5 preguntas que mida lo aprendido.
Use indicadores de progreso: En el entorno empresarial, los empleados valoran saber cuánto tiempo les tomará completar una tarea. Incluya un indicador de progreso visual que muestre cuánto han completado y cuánto les queda. Esto ayuda a los empleados a gestionar mejor su tiempo.
Gamifique los logros: Incorpore elementos de gamificación como insignias, niveles o puntos por completar módulos. Esto motiva a los empleados a superar objetivos y fomenta la competencia sana dentro de la empresa. Ofrecer recompensas pequeñas (como un café gratis o un reconocimiento interno) puede aumentar la participación.
Con estas prácticas, puede asegurarse de que sus cursos de eLearning no solo sean efectivos, sino también atractivos y motivadores para sus empleados. Y recuerde: la clave está en mantener el equilibrio entre profundidad y entretenimiento para que nadie sienta la tentación de mirar el teléfono a escondidas.
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El microlearning, o microaprendizaje, es una estrategia de capacitación diseñada para ofrecer pequeños bloques de contenido educativo en cortos periodos de tiempo.
Cada módulo tiene una duración de entre 2 y 10 minutos y está creado para cumplir con objetivos de aprendizaje específicos de manera rápida y efectiva.
Se llama microlearning porque, literalmente, ofrece "micro" sesiones de aprendizaje: dosis concentradas de información que los empleados pueden consumir en cualquier momento sin interrumpir significativamente su rutina diaria.
Este enfoque es especialmente útil en el entorno laboral, donde el tiempo es limitado y las responsabilidades laborales no dejan espacio para largas sesiones de capacitación.
Objetivos de aprendizaje específicos: Cada módulo se enfoca en una sola habilidad o conocimiento concreto. No hay información innecesaria; el objetivo es proporcionar soluciones rápidas y precisas. Por ejemplo, un video de microaprendizaje podría enseñar a los empleados a usar una nueva herramienta digital en cinco minutos.
Duración breve: Estos módulos breves son perfectos para una sesión rápida de aprendizaje durante una pausa para el café o justo antes de una reunión, minimizando la interrupción de las tareas diarias.
Contenido enfocado y práctico: El microaprendizaje va al grano. Proporciona solo la información esencial y útil para resolver problemas inmediatos. Ya sea una guía rápida sobre cómo completar un formulario o un resumen conciso de procedimientos de seguridad, el objetivo es mantener la atención del empleado y ofrecer valor rápidamente.
Aprendizaje justo a tiempo: Este método entrega información relevante justo cuando se necesita. Si un empleado está a punto de dar una presentación, una sesión de microlearning sobre técnicas de oratoria puede ofrecer consejos útiles en el momento adecuado.
Entrega flexible: Ya sea un video corto, un cuestionario rápido o una infografía, el microlearning se adapta a diferentes formatos, haciendo que el aprendizaje sea accesible y atractivo para todos.
Refrescar habilidades: Ideal para recordar conceptos clave o actualizaciones sobre políticas internas de la empresa o nuevos procedimientos.
Introducción de nuevas herramientas: Cuando se lanza un nuevo software o herramienta, los empleados pueden aprender rápidamente a usarlo sin sentirse abrumados.
Actualizaciones de cumplimiento: Para informar sobre cambios en leyes o regulaciones, el microaprendizaje ayuda a difundir los puntos esenciales de forma rápida y clara.
Preparación para tareas específicas: Antes de iniciar una tarea o proyecto, un módulo de microaprendizaje puede proporcionar instrucciones clave, como los protocolos de seguridad antes de operar nueva maquinaria.
Soporte en el desempeño: Cuando surgen problemas o desafíos en el trabajo, el microaprendizaje ofrece soluciones inmediatas y prácticas, como guías rápidas para resolver problemas técnicos.
Defina un objetivo por módulo: Antes de empezar, decida exactamente qué quiere que los empleados aprendan en cada módulo. Un solo tema por módulo es clave. Ejemplo: "Al finalizar este módulo, los empleados sabrán cómo enviar una factura correctamente".
Limite la duración a menos de 10 minutos: Cada módulo debe ser rápido y directo. Si tarda más de 10 minutos, probablemente sea demasiado. Si puede hacerlo en 5 minutos, mejor. Use un temporizador para medir la duración del contenido mientras lo desarrolla.
Diseñe para la resolución de problemas: En el entorno empresarial, los empleados suelen necesitar soluciones rápidas y prácticas. Diseñe los módulos de microaprendizaje para resolver problemas específicos del día a día laboral, como "cómo usar una nueva herramienta", "mejorar la atención al cliente" o "gestionar un conflicto en el equipo". Cada módulo debe enfocarse en resolver una necesidad concreta.
Cree módulos que funcionen de manera independiente: Cada módulo debe ser autónomo. Los empleados deben poder completar cualquier módulo sin depender de otro anterior. Esto les da la libertad de elegir lo que necesitan aprender en el momento justo.
Enfoque en microtareas específicas: Divida tareas empresariales complejas en microtareas manejables. Por ejemplo, si está creando un módulo sobre ventas, divida el proceso en partes pequeñas como "cómo hacer una llamada de ventas efectiva" o "cómo gestionar objeciones del cliente". Esto ayuda a que los empleados se concentren en aprender una sola cosa a la vez.
Simplifique el diseño visual: El diseño debe ser limpio y libre de distracciones. Use una paleta de colores limitada y elementos visuales coherentes con la identidad de la empresa. Un diseño minimalista mejora la concentración en el contenido, en lugar de distraer con gráficos innecesarios.
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En el entorno de la capacitación corporativa, que evoluciona a gran velocidad, es fundamental comprender que el eLearning y el microlearning no son rivales, sino aliados.
Ambos juegan un papel crucial y se complementan para crear una experiencia de aprendizaje integral que se adapte a las necesidades y ritmos de cada empleado.
En lugar de optar por uno u otro, las empresas exitosas combinan ambas estrategias. Al hacer esto, pueden proporcionar una formación que no solo sea completa y profunda cuando se necesita, sino también rápida y accesible para las necesidades más inmediatas.
Use ambos enfoques: Utilice el eLearning para profundizar en temas más complejos y el microlearning para necesidades específicas y rápidas.
Flexibilidad ante todo: Ofrezca diferentes opciones de aprendizaje que se ajusten a los tiempos y necesidades de sus empleados, permitiéndoles acceder al contenido en el momento más conveniente para ellos.
Fomento del aprendizaje continuo: Combine módulos largos y cortos para mantener un flujo constante de desarrollo personal y profesional.
¿Cómo puede integrar mejor el eLearning y el microlearning para que apoyen el crecimiento de su equipo?
¿Qué conocimientos o habilidades podrían fortalecerse rápidamente mediante microlearning?
¿En qué áreas de su programa de formación podría el eLearning aportar mayor profundidad y comprensión?
Adoptar una combinación de estas estrategias hará que el aprendizaje sea más accesible, eficiente y relevante para su equipo, asegurando una capacitación integral que favorezca tanto el crecimiento personal como el rendimiento profesional.
Ahora, nos gustaría conocer su experiencia. ¿Ha utilizado eLearning o microlearning en su lugar de trabajo o en su propia formación? ¿Cómo cree que estas estrategias podrían influir en el futuro del aprendizaje en su empresa?
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