Hagamos un ejercicio de memoria y recordemos las clases de biología. ¿Qué es una célula? La célula es la unidad básica de cada ser vivo: sea humano, animal o planta. Podríamos decir que la célula es el inicio de la vida.
Ahora, llevemos esta idea al eLearning. En este caso, un curso eLearning es una entidad con conexiones, ideas y aspiraciones compuesto de unidades didácticas, es decir, células. Y lo que inyecta vida a cada una de esas células es el diseño instruccional, pues de este proceso dependen la calidad y cantidad de aprendizaje significativo para el participante.
Si usted desea generar un curso eLearning, siga el ejemplo del ciclo celular, pues cada unidad didáctica está dividida en una serie de elementos, primordiales para permitir el aprendizaje. Al interior de cada una se encuentra el ADN necesario para construir situaciones didácticas efectivas, articuladas y completas que cumplan un ciclo de aprendizaje. A continuación analizaremos cada uno de sus componentes.
Evaluación diagnóstica
Incluya una Evaluación diagnóstica al inicio del curso. Esto permitirá al participante conocer u homologar los conocimientos previos que tenga sobre el tema principal. Puede presentar la evaluación como un test o mediante el planteamiento de una situación problemática acompañada de preguntas.
Objetivos de aprendizaje
Los Objetivos de aprendizaje constituyen el QUÉ y PARA QUÉ del curso; son la brújula que dirige el proceso de aprendizaje. A partir de ellos se definen los contenidos, las estrategias y la forma de evaluación. Para redactarlos considere que el objetivo debe describir la acción que el participante será capaz de efectuar al finalizar el curso, utilizando un verbo en infinitivo.
Ejemplo: Al finalizar el curso, el participante será capaz de planear una unidad didáctica para un curso eLearning.
Estrategias de enseñanza-aprendizaje
Si los objetivos son el qué y para qué de un curso, las Estrategias de enseñanza-aprendizaje definen el CÓMO se lograrán dichos objetivos. Se trata de procedimientos que buscan generar aprendizaje significativo en los participantes. Es recomendable que los cursos incluyan diferentes tipos de estrategias:
- Activación. Que preparen el terreno, activando los conocimientos previos que tiene el participante e introduzcan el tema.
Ejemplo: En un curso sobre Medidas de seguridad durante un sismo, se puede utilizar una nota periodística o video sobre un evento sísmico en el país y sus principales consecuencias.
- Demostración. Ilustran la información por aprender de manera clara y sencilla, y la organizan para facilitar su comprensión.
Ejemplo: En un curso sobre Producto, se puede utilizar un cuadro comparativo que muestre las diferencias entre las características de cada producto.
- Aplicación. Son estrategias que permiten llevar lo aprendido a la práctica.
Ejemplo: En un curso sobre Leyes aplicables al trabajo, se puede incluir un caso práctico con preguntas que permitan aplicar las cláusulas legales al contexto particular del caso.
- Recapitulación. Su función es mostrar los aspectos más relevantes del tema recién visto. Utilizar resúmenes o síntesis es una estrategia de recapitulación común, aunque también pueden emplearse esquemas, mapas conceptuales, infografías, etc.
Ejemplo: En un curso sobre Medidas de seguridad durante un sismo, se puede utilizar una infografía con las recomendaciones de seguridad a seguir antes, durante y después de un sismo.
Evaluación Formativa
La Evaluación Formativa le permitirá repasar lo que se está aprendiendo y proveer retroalimentación al participante sobre su progreso.
Evaluación Sumativa
Incluya una Evaluación Sumativa al final del curso para verificar cuantitativa y cualitativamente el cumplimiento de los objetivos de aprendizaje.
Estos componentes constituyen el eje crítico de la arquitectura pedagógica. Su uso e interacción, de forma creativa e inteligente, puede ser la diferencia entre un curso eLearning que ha cobrado vida o una fusión de palabras que no logró el desarrollo celular esperado.