Imagine estar sentado frente a una computadora para completar un curso eLearning e instantáneamente sentirse confundido, abrumado y frustrado con la cantidad de información mostrada a la misma vez en una sola pantalla.

Esta situación, lejos de ser un caso aislado, se ha convertido en una experiencia común entre los colaboradores que buscan capacitarse a través de plataformas digitales. El resultado suele ser una mezcla de confusión, agobio y frustración, transformando lo que debería ser una oportunidad de crecimiento en un laberinto informativo.

La queja es recurrente: demasiados datos, exceso de contenido y una sensación abrumadora que convierte la formación en línea en un maratón exhaustivo más que en un proceso enriquecedor y estimulante.

En la búsqueda de ofrecer un compendio exhaustivo de conocimientos, caemos en la trampa de la infoxicación, olvidando que la efectividad del eLearning reside en su capacidad de ser digerible, relevante y atractivo para el colaborador. 

Recordemos que el cerebro humano no es un depósito al que se le puede llenar indiscriminadamente de información. Requiere de un ritmo de aprendizaje que respete sus tiempos de procesamiento y asimilación. La sobrecarga de contenidos no solo es contraproducente sino que va en detrimento de la propia naturaleza interactiva y flexible del eLearning.

Este artículo le ofrece cinco estrategias esenciales para que, como diseñador instruccional o líder de formación en su empresa, pueda enriquecer la experiencia de aprendizaje digital y blindarla contra el exceso informativo.

1) Use títulos y subtítulos estratégicamente

Redacte encabezados que capturen la esencia de cada pantalla y a y subtitule con claridad para dirigir eficazmente el aprendizaje.

Los títulos no deben limitarse a ser meros indicativos como "Introducción" o "Conclusión". Opte por enunciados que, a primera vista, comuniquen el núcleo temático del contenido y propicien el interés y la comprensión inmediata.

Un encabezado eficaz es una promesa de valor; debe resonar con la curiosidad del usuario y motivarlo a sumergirse en el contenido. Por ejemplo, un título como "Tres innovaciones que revolucionarán el ecosistema empresarial" resulta más provocador y revelador que un simple "Beneficios". Esta precisión no solo enriquece la curiosidad sino que prepara al cerebro para el aprendizaje focalizado en el tema que se presentará. 

Incorpore siempre el encabezado en la pantalla, garantizando su visibilidad. Apoyándose en la psicología cognitiva y el Principio de Señalización, el uso estratégico de títulos y subtítulos claros y descriptivos estructura la información de manera que facilita su asimilación y retención.

Recuerde que un buen encabezado anticipa el contenido y compromete al usuario en continuar absorbiendo el contenido. A su vez, los subtítulos deben servir de escalones lógicos que faciliten el ascenso por la estructura de la pantalla, delineando puntos clave.

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2) Evite dividir la atención

Al diseñar elementos formativos, es crucial que el texto explicativo y las imágenes correspondientes coexistan armónicamente cada pantalla. Esto significa que deben estar emparejados estratégicamente, evitando la dispersión y la fragmentación de la atención del colaborador.

Asegúrese de que la proximidad entre texto e imagen sea tal que el ojo pueda saltar naturalmente de uno a otro sin esfuerzo. Cuando estos elementos están distantes o desconectados, la persona debe dividir su enfoque para conectar ideas, lo que puede conducir a una sobrecarga cognitiva innecesaria.

Aquí algunos consejos adicionales para evitar la división de la atención:

1. Anclaje visual: Use líneas o colores de fondo sutiles para crear una conexión visual entre el texto y las imágenes relacionadas.

2. Narrativa visual: Asegúrese de que las imágenes no solo ilustren el concepto sino que también cuenten una historia que el texto refuerce, facilitando así la memorización y comprensión.

3. Sincronización de contenido: Al presentar animaciones o videos, sincronice la aparición de textos explicativos con momentos clave de la visualización para mantener la atención centrada.

4. Puntos de foco: Use marcadores o señales visuales para destacar áreas importantes en el texto o en las imágenes que requieren especial atención.

5. Espacio blanco estratégico: Emplee el espacio blanco para dar respiro visual y ayudar a separar distintas ideas sin crear barreras cognitivas.

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3) Menos es más: No incluya elementos que no apoyan la idea principal 

¿Considera que incluir más contenido en cada pantalla de su curso sería bueno para sus colaboradores? 

Recientes investigaciones sugieren que no es así. Si usted simplemente está presentando grandes bloques de información en una pantalla, lo que en realidad está haciendo es cerrar el proceso cognitivo de la persona.

Los seres humanos aprenden mejor cuando el contenido poco relevante o innecesario se excluye en lugar de incluirlo (el Principio de Coherencia).

Puede ser difícil decidir NO incluir contenidos en el proceso de desarrollo de un curso eLearning, pero es esencial para evitar abrumar a los alumnos. Esto se puede lograr fácilmente de las siguientes maneras:

• Elimine el contenido redundante. Esto permitirá a los usuarios procesar la información una vez en lugar de tener que acceder a la carga de memoria de trabajo varias veces. La información técnica redundante puede parecer útil repetirla, pero en su lugar puede dejar a los usuarios confundidos y abrumados.
• Identifique los contenidos más importantes y remueva las partes no esenciales. Diversos estudios han demostrado que la eliminación de texto, audio e imágenes extraño o poco relevantes efectivamente reduce la sobrecarga de información para los estudiantes.
• ¡Mueva o elimínelo! Existe información suplementaria que a menudo se considera " buena de tener ", pero no es esencial.  Esta información la puede mover a un lado, en pestañas o crear enlaces, por lo que sigue siendo de fácil acceso, pero no está en un lugar que pueda sobrecargar el usuario.

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4) Facilite materiales complementarios 

Como mencionamos en el punto anterior, al diseñar una pantalla de eLearning, menos suele ser más. En lugar de saturar la vista con demasiados datos, es preferible centrarse en transmitir únicamente la información crucial. El contenido primordial debe ser el protagonista de la pantalla, permitiendo al colaborador comprender los conceptos claves sin distracciones o sobrecarga cognitiva.

Para el material adicional, desarrolle recursos de apoyo que los usuarios puedan consultar o descargar según sea necesario. Esto no solo aligera la carga informativa en la interfaz principal, sino que también empodera a los estudiantes al proporcionarles la flexibilidad de acceder a información detallada cuando la necesiten. Este enfoque refleja un respeto por el tiempo y el espacio cognitivo del aprendiz, permitiéndole digerir la información a su propio ritmo.

Implemente estos recursos adicionales de manera intuitiva dentro del curso, con enlaces o botones de fácil acceso que inviten a una exploración más profunda. Por ejemplo, en lugar de incluir extensos párrafos de texto, puede optar por integrar un video explicativo que esté disponible para ser visto opcionalmente, o un documento con datos ampliados que se pueda descargar. 

Recuerde que el objetivo es crear un ambiente de aprendizaje que sea al mismo tiempo completo y sin esfuerzo, donde la profundidad del conocimiento esté al alcance sin imponer una presencia constante en la pantalla principal. Este enfoque modular del diseño de eLearning responde a las necesidades individuales de cada usuario y fomenta una experiencia de aprendizaje más personalizada y auto-dirigida.

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5) Utilice señalizaciones visuales con propósito

La utilización de recursos tipográficos como la negrita, junto a elementos gráficos como círculos de color, flechas indicativas, y técnicas de subrayado o resaltado, son estrategias eficaces para orientar la atención del usuario hacia la información más relevante.

Reducir el volumen de datos a recordar facilita la concentración en los aspectos cruciales del contenido. Los estudios corroboran que destacar términos clave y resaltar elementos específicos en pantalla no solo captura la atención, sino que también fortalece la asociación mental entre la información esencial y la complementaria.

Considere los siguientes consejos para una señalización visual efectiva:

1. Moderación: Use señales visuales con moderación para evitar el efecto contrario; demasiados elementos destacados pueden llevar a una saturación visual y reducir su eficacia.

2. Consistencia: Mantenga un sistema de codificación visual coherente a lo largo del curso para que los usuarios aprendan rápidamente qué significa cada señal y cómo deben reaccionar.

3. Contraste y Color: Elija colores que contrasten adecuadamente con el fondo y entre sí para asegurar una distinción clara y una accesibilidad universal.

4. Jerarquía Visual: Establezca una jerarquía en la información usando diferentes tamaños o estilos de señalización para indicar el nivel de importancia de cada elemento.

5. Feedback Inmediato: Proporcione retroalimentación visual cuando el usuario interactúe con el contenido, como cambios de color o forma en botones y enlaces para confirmar la acción realizada.

Al aplicar estas señalizaciones visuales estratégicamente, no sólo mejorará la capacidad del usuario para filtrar y procesar la información presentada, sino que también enriquecerá la experiencia de aprendizaje, facilitando la retención de conocimiento y la aplicación práctica del mismo.

Más tips para evitar la sobrecarga visual en su curso eLearning aquí.

En conclusión, la prevención de la infoxicación en los entornos de eLearning es un desafío que requiere de una estrategia bien pensada y de un diseño instruccional cuidadoso. Las estrategias delineadas en este artículo  son pilares que sostienen la creación de experiencias de aprendizaje eficientes y significativas.

La sobrecarga de información no solo afecta la capacidad de retención de conocimientos sino que también impacta negativamente en la motivación y en el compromiso del colaborador. Al aplicar estas técnicas, favorecemos un entorno donde la información es presentada de manera que se promueve el entendimiento y la aplicabilidad en la vida real del trabajador.

Recordemos que el objetivo final es capacitar a los colaboradores, no solo para que consuman contenido, sino para que construyan competencias y habilidades relevantes que puedan ser aplicadas inmediatamente en sus roles laborales. Al alinear nuestras estrategias de diseño con las necesidades cognitivas de los aprendices, avanzamos hacia el desarrollo de un eLearning centrado en el usuario, dinámico y sobre todo, efectivo.