1. Establezca metas realistas

Considere lo que realmente quiere lograr a través del eLearning. ¿Qué está tratando de transmitir con el curso? ¿Informar? ¿Educar? Los educadores llaman a este diseño “hacia atrás”. Se empieza por determinar las habilidades esenciales que los estudiantes necesitan y así, diseña el aprendizaje y las actividades basadas en esos objetivos.

Emprender iniciativas de eLearning sin entender su meta final lo prepara para el fracaso definitivo. Si los cursos no tienen un propósito, entonces usted está perdiendo su dinero y esfuerzo. Decida lo que va a lograr y cómo va a llegar allí y anótelo. 

2. Entienda a sus estudiantes

Cuando usted conoce a sus alumnos y sus preocupaciones, usted desarrolla sus cursos enfocados en ellos, lo que crea un ambiente de aprendizaje exitoso. Los estudiantes que sienten que sus necesidades no están siendo satisfechas, rara vez invierten tiempo en el proceso y así, su inversión fracasa desde el principio.

La mejor manera de evitar esto es a través de una cuidadosa investigación de mercado al iniciar el proyecto. Por lo tanto, empiece a conocer a sus alumnos, lo que necesitan y esperan de la experiencia eLearning. Luego, modifique el contenido para que este se ajuste tanto al conocimiento actual de los estudiantes y al que buscan tener. El eLearning debe centrarse en todo momento en los estudiantes y lo que estos tienen que hacer con toda la información presentada.

3. Cree contenido atractivo y de calidad

 Los “insights” que se aprenden a partir de establecer metas realistas y comprender a los alumnos serán la base de su contenido y le ayudará a crear estrategias de cómo involucrar a los estudiantes en sus cursos eLearning. La calidad está por encima de la cantidad en cualquier momento. Sólo se puede maximizar lo que están creando si esto es bueno y relevante para su audiencia.

Usted debe ir un paso adelante, conocer sus objetivos, lo que les quita el sueño y cómo puede ayudar a resolver problemas. Si usted sabe por qué deberían interesarse en lo que está en su curso, entonces debería ser bastante fácil crear cursos eLearning que le ayudarán a resolver problemas en su trabajo diario. Usted nunca fallará en invertir en los estudiantes y sus necesidades.

4. Desarrolle un plan de comunicación claro

Nada frustra más a los alumnos que la falta de comunicación durante el proceso de aprendizaje. Desarrolle un plan de lo que va a comunicar a sus alumnos y cuándo lo hará. Fundamente estas comunicaciones en su objetivo final y entregue los mensajes de manera que sus alumnos quieren recibirlos.

Asimismo, elabore una estrategia para responder a las preguntas de los alumnos, incluyendo quienes responderán y cómo. Asegúrese de maximizar la inversión que está haciendo al construir relaciones en las que prevalece la conversación con los alumnos.

5. Solicite  retroalimentación

El eLearning eficaz pasa por un proceso constante de reflexión y de revisión sobre los diferentes datos, como la retroalimentación de los estudiantes. Sus alumnos pueden proporcionar información valiosa sobre el éxito de los cursos al decirle lo que aprendieron, cómo han aplicado lo que aprendieron y los resultados de esos esfuerzos. Utilice a sus alumnos para descubrir esos éxitos como prueba del retorno de la inversión de eLearning.

6. Permanezca flexible

La ventaja del eLearning es precisamente su flexibilidad, pero con frecuencia las empresas pierden de vista ese activo clave. Para que el aprendizaje sea efectivo es importante reaccionar ante las circunstancias cambiantes del entorno. Cuando se trata de eLearning, no existe una "talla única" o edictos grabados en piedra. Mantenga la ventaja competitiva del eLearning al permanecer abierto y flexible.

7. Mida sus programas de eLearning

Otro beneficio clave del eLearning es la capacidad de medir exactamente lo que una persona hace en un curso. Se puede medir la inscripción, el ritmo en el que se mueven los estudiantes a través del curso, la finalización del curso y las puntuaciones. Estos datos informarán qué tan efectivo fue el curso. Las empresas pueden utilizar esta información para hacer cambios en el contenido, evaluar las metas de aprendizaje o determinar el impacto que de un curso.